jueves, 30 de septiembre de 2010

Las mujeres de los barras. Como viven y piensan.


Gorro Nike, pelo muy corto de un rubio chillón oxigenado, temporadas acumuladas de cama solar y look fashion. “Hola, soy Pamela. ¿Querés ver la mercadería que tengo?”, soltaba en tono dulzón a las que estaban a punto de entrar al probador de un local de ropa exclusiva en zona norte. Allí nomás abría el bolso y exhibía unos pantalones de primera marca que en el circuito formal cotizaban a 400 pesos pero ella ofrecía a 200. En cómodas cuotas, aunque ella vendiera sólo cash, iba contando que su marido era barrabrava de River y aquella era la segunda vez que caía preso. Lo visitaba tres veces por semana en Ezeiza y se esforzaba porque su hombre siguiera viviendo “como un rey”. Y ella, como lo que imaginaba que era una reina. Aunque sus hijas comieran polenta durante días, juntaba los 300 pesos que costaban las zapatillas que él le había encargado y con las que pensaba pisar fuerte en el penal. Pamela tampoco se privaba del look cheto e incansables sesiones de cama solar. “Cierro los ojos y me imagino en el Caribe”, justificaba entre risas. Mientras tanto, sus amigas le cubrían necesidades más básicas.
El de Pamela, como se verá, no es el único caso de sumisión entre las mujeres de los barras. ¿Qué las seduce de esas personalidades violentas? ¿Hay un denominador común?
“El ejercicio de una masculinidad violenta genera una fuerte atracción. El coraje, la valentía, el defender los honores, son condimentos que funcionan como imán en muchas mujeres”, opina el antropólogo social e investigador del Conicet, José Garriga Zucal.
La bella y la bestia. Soledad Spinetto ingresó a la Gobernación de la provincia de Buenos Aires y tuvo un desempeño profesional brillante. En pocos años, llegó a ser la secretaria privada del gobernador Felipe Solá. De lunes a viernes se calzaba el tailleur. Pero el domingo era otra. Por nada del mundo dejaba de ir a la cancha a alentar a Boca Juniors. Sus compañeros creyeron que bromeaba cuando contó que estaba de novia con Rafael Di Zeo, el discípulo de El Abuelo, el mítico jefe de la barrabrava boquense. Ella repetía “muero de amor por él” e intentaba que sus contactos ayudaran al Romeo que ya empezaba a tener los primeros traspiés ante la Justicia. Nadie podía creer que esa mujer, brillante y prometedora, perdiera su puntualidad inglesa por una pasión irracional por Di Zeo. Sus ex compañeros todavía recuerdan la discusión a los gritos que en septiembre del 2005 tuvieron Soledad y su jefe. Allí se quebró la relación con Solá, y salió eyectada de la Gobernación a la Secretaría de Asuntos Agrarios bonaerense. El cambio pareció no afectarla. A los tres meses, se casó con Rafael Di Zeo, ya líder indiscutido de la minoría violenta, en una quinta de Benavídez. Como una reconfirmación de su amor, se tatuó en la espalda la palabra “Rafa”. Vivieron una luna de miel en continuado –que incluyó el último mes en la clandestinidad- hasta que él se entregó a la Justicia y quedó detenido a fines de marzo de este año. Hoy, ella continúa esperándolo.
El vendaval que empezó a sacudir desde febrero de este año a la interna de los barras de River desnudó una estructura con códigos y justicia propia. Sus mujeres no se quedaron atrás y parecen haber adoptado algunos razonamientos de sus hombres. Laura Viña, la stripper y prima lejanísima de Máxima Zorreguieta, fue la novia de Gonzalo Acro, asesinado el 9 de agosto pasado. “Era bueno como pocos. Una persona con códigos y que, como siempre me decía, no era traidor”, repite en clave propia de “Los Borrachos del Tablón”.
Del otro lado Carolina Nimeth, la ex mujer de Alejandro “Bala” Echeverry (uno de los imputados y dueño del auto desde el que supuestamente le dispararon a Acro) aportó información ante la
Justicia que comprometió a su ex pareja. “Para estar con uno de ellos tenés que bancarlo a muerte. Yo lo enfrenté pero soy una excepción. La mayoría de las mujeres son iguales a ellos”, filosofa Nimeth como si hubiese podido desprenderse de su pasado. No es lo más común. “En general, estas mujeres son funcionales al sistema que sostiene a sus parejas”, explica el antropólogo Garriga Zucal. Es probable que ahora, con la Justicia intentando quebrar esa red social violenta que son los barras, las señoras comiencen a aportar pruebas para apuntar a los jefes máximos, algo impensable poco tiempo atrás. Además, hay diferencias sociales notorias entre los integrantes de esos grupos amparados por muchos dirigentes. Como en el caso de Pamela o de Nimeth, están al borde de sus fuerzas, sin dinero y solas con sus hijos. En cambio, muchos barrabravas le dan un buen pasar a sus familias.
Señoras VIP. Son las que pueden vivir en un country, se pasean en camionetas importadas y mandan a los chicos a buenos colegios, aunque conviven con la amenaza de que sus maridos vayan presos. En general, todas gozan de buenas ubicaciones en los recitales organizados en las canchas, pero pocas pueden codearse con los dirigentes y participar de las fiestas sociales. Ese es un mundo masculino en el que no hay demasiado espacio para las esposas. “Para estos hombres, el mundo de lo femenino está dividido entre “la bruja” y “la puta””, explica el psicoanalista Sergio Zabalza.
Durante los 14 años que Carolina Nimeth estuvo al lado del ahora prófugo Echeverry, el timbre de su casa podía sonar en medio de la noche y él se iba. Reaparecía después de días sin que mediara explicación.
Cuando hace unos meses el marido de Pamela, la que vendía jeans, salió de la cárcel, ella se sometió de vuelta a su dominio: volvió a ser geisha de tiempo completo y se distanció de las amistades que no aprobaban al hombre. La vuelta a la tribuna también le devolvía a el ex preso su status dentro del universo violento de cada domingo. Para el psicólogo Zabalza, la barrabrava funciona como un tótem que le permite a sus integrantes sentirse machos.

Sin embargo, no todo es lo que parece. ¿Qué pasa cuando esos hombres quedan solos con sus parejas en la intimidad de sus casas? Responde Carolina Nimeth, la mujer del prófugo: “En la cancha mandaba él, pero en casa mandaba yo”. casa mandaba yo”.

INDEPENDIENTE Carnet de cañon




Comparada defendió la presencia de los barras al aprobar el balance: “Eran todos socios”. Nakis pegó.
La asamblea del lunes por la noche, en la que el oficialismo aprobó el balance 2009/10, dejó cola por dos motivos: los 144.000.000 de pesos de pasivo y la presencia de la barra como garante de la seguridad del acto. Justamente, los abucheos que recibieron los representantes de la oposición, de parte de los 200 hinchas presentes, provocó que abandonaran el recinto y no emitieran su voto. “Había gente que no pertenecía a Independiente. Habrá habido contratados... La intención era callarnos, molestar a los que están en contra de la Comisión Directiva”, denunció Noray Nakis en radio Del Plata. Antes de la asamblea, el presidente de la opositora Lista Roja tuvo una fuerte discusión verbal con Cristian Mattera, secretario general. Julio Comparada lo cruzó en La Red: “Los que entraron eran todos socios. Hemos hecho un control exhaustivo. El acto se desarrolló en absoluta normalidad, hay que aguantar qué digan cualquier cosa”. Y agregó: “Sí, el pasivo es alto, pero construimos un estadio con fondos propios, 30.000.000 de dólares, que están volcados ahí. Nos endeudamos para crecer”. Y Mattera agregó: “Si estuviéramos cerca de la quiebra, como quieren hacer creer, ningún banco, como el Provincia, nos hubiera prestado $ 20 millones”.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

CAMBACERES De barra a presidente



Adrián Quinteros, ex jefe de la barra y actual titular de Cambaceres, está preso acusado de robo calificado.
Se sabe, los violentos cada vez tienen más influencia en los clubes. Pero en pocos como en Cambaceres se dio el hecho que un reconocido jefe de la barra brava que tuvo una causa pesada por violencia en el fútbol, llegue a la presidencia de la institución. Eso sucedió este año, cuando Adrián Quinteros asumió las riendas del Rojo. Quien liderara el paravalanchas del equipo de Ensenada hasta 2009, entró como vicepresidente segundo en la lista de Néstor Gestari, quien ganó las elecciones. Y a comienzos de este año tras las licencias pedidas por el propio Gestari y el vice primero, Horacio Curti, quedó a cargo. Hasta ayer, claro, cuando la Justicia lo mandó a detener acusado de liderar una banda de delincuentes que cometía ilícitos en La Plata y sus alrededores. Sí, increíble pero real.
Según la causa que instruye el fiscal Marcelo Martín, a Quinteros se le imputan dos robos agravados por el uso de armas, contra cobradores de un frigorífico. De cualquier manera, su relación con la Justicia viene de vieja data. Cuando lideraba la barra, tuvo una causa pesadísima: en marzo de 2007 y en la previa de un partido con Brown de Adrogué, hubo un enfrentamiento de hinchas y un vecino de la zona, Luis Ramírez, resultó gravemente herido. Los primeros indicios apuntaron al actual presidente de Cambaceres, quien pasó una semana preso acusado de tentativa de homicidio. Muy vinculado a la barra de Gimnasia y también al PJ local (su padre, Mario, era hombre del ex intendente Adalberto Del Negro y el propio Quinteros tiene relación con el actual jefe comunal, Mario Secco), desde la barra trabó relaciones con la poderosa filial local del sindicato Uocra (obreros de la construcción), que lidera Juan Pablo Medina, El Pata. De ahí que la barra de Cambaceres tuviera activa participación en el traslado de los restos del General Perón a la quinta de San Vicente, el 17/10/06, que terminó con una batahola a los tiros que también involucró a barras de Estudiantes e Independiente, ligados estos a la CGT de Hugo Moyano.
Esta tarde habrá una reunión de la CD para ver cómo se encauza la vida institucional de un club que decidió, meses atrás, dejar su organización en manos de un líder barrabrava.

INDEPENDIENTE - El balance es negativo...



“Independiente se endeudó para crecer, en medio de una crisis, que nos desfavoreció”. En una frase, el presidente Julio Comparada intentó explicar la situación del club, algo que no había podido hacer completamente en la noche del lunes, en una tumultosa Asamblea en la que el oficialismo logró la aprobación del balance deficitario con la custodia de la barra brava.
Cuestionado por la opositora Lista Roja, que hasta hace poco gobernó durante años el club de Avellaneda, se dio a conocer el balance que arrojó un incremento de 11 millones de pesos en el pasivo, que alcanza los 144 millones.
Lo grave de la noche fue que, entre los socios, estaba Pablo Bebote Alvarez, el capo de la barra, con un grupo de hinchas que se encargaron de “garantizar la seguridad” de la reunión. Ellos habrían entrado en acción cuando el dirigente opositor Noray Nakis, acompañado por allegados, intentó ingresar al primer piso de la sede de avenida Mitre pero no lo dejaron porque no es representante legal en la Asamblea. Ahí se generó un cruce con el secretario general Cristian Mattera, que finalizó con la intervención de los barras, aunque no hubo incidentes.
El oficialismo impuso su número para aprobar el balance por 58 votos a 16. “El pasivo de Independiente tiene que ver con que tuvimos que refundar un club”, afirmó Comparada en Radio La Red, y agregó: “Incorporamos al patrimonio un predio de 30 millones de dólares y estamos por terminar uno de los mejores estadios. Si no lo hubiésemos construido, el balance era el mejor de Sudamérica”.

BASTA DE VIOLENCIA - Avellaneda violenta



Una banda de barras de Arsenal, Racing y el Rojo aparece como responsable de un tiroteo infernal.
El 21/8/10 se festejaba en el restaurante El Pato, de Avellaneda, el cumpleaños de Gastón Frutos, hijo de Abel, jefe del sindicato de los Panaderos que estuvo muy cerca de Hugo Moyano hasta poco tiempo atrás, y que fuera también presidente de Dock Sud. Esa noche y cuando faltaba poco para que se apagaran las velitas, un grupo entró al lugar y empezó a disparar contra una mesa y por milagro no hubo ninguna víctima fatal. El blanco era un barra de Independiente, Pichón, que había salido hacía poco de la cárcel y está enfrentado a la actual conducción de la barra. En el local también estaba el Oso Pereyra, hombre de La Doce y guardaespalda de los Frutos. La primera hipótesis de los investigadores fue la interna de la barra Roja, teniendo en cuenta además que una semana antes del hecho había sido acribillado en Dock Sud, el Pulga, un barra importante de la fracción oficial. Pero por estas horas, se robusteció otra línea de acción: que el hecho está ligado a la interna de los violentos pero también a una banda con accionar delictivo en el Sur del Gran Buenos Aires, integrada por miembros de los paravalanchas de Arsenal, Racing e Independiente. Sí, de terror.
De hecho, la Justicia mandó a allanar dos domicilios vinculados con esta nueva hipótesis. Según se reconstruyó, un capo de los Rojos de nombre Hernán, fue ese día en un Bora azul al Pato acompañado de Minti y el Tonga, dos encumbradísimos barras de Arsenal y un cuarto apodado Juanito, que tendría vinculación colateral con gente de Racing, a buscar a Pichón por temas de barra, droga y mujeres. Un cóctel infernal que vive acosando a nuestro fútbol.

INDEPENDIENTE - Al Diablo lo cuida un Bebote...



En plena Asamblea de Independiente, el líder de la barra Bebote, fue el encargado de brindar seguridad. Con 200 barras, entre los que había gente de Dock Sud y San Telmo, se apaciguaron los ánimos de una reunión caliente. La oposición se fue y el oficialismo aprobó el balance...
Había arrancado tranquila la Asamblea de Socios en la sede de Independiente. Al mando del presidente Julio Comparada, pasadas las ocho de la noche, toda la Comisión Directiva dio inicio a una reunión que serviría, entre otras cosas, para aprobar el próximo ejercicio económico e informar de un pasivo que supera los cien millones de pesos. La reunión era en el primer piso de la Avenida Mitre hasta que en planta baja apareció un grupo que respondía a la lista Roja, opositores a la actual conducción de Comparada.
Con Noray Nakis a la cabeza, el grupo opositor tenía como objetivo entrar al primer piso, algo que no pudieron hacer ya que ninguno de ellos es representante legal en la asamblea. Se generó un violenta discusión entre el secretario del club, Cristian Matera, y la gente de Noray, hasta que apareció en escena Bebote, el actual capo de la barra del Rojo, quien con al menos 200 laderos intercedió para que la discusión no pasara a mayores. Sí, los que garantizaron la seguridad fueron Bebote y sus muchachos. El propio capo de la barra le garantizó a Noray que podría pasar al anillo del primer piso para poder presenciar la Asamblea sin que nadie pudiera agredirlo. Bebote desparramó a su gente por todo el recinto, mientras abajo el representante legal de la lista Roja daba su discurso opositor de una manera enérgica.
En el final del discurso de Espósito, éste le pidió al oficialismo que votase de manera negativa y así dar por abortada la chance de Comparada de aprobar el balance. En ese momento comenzaron los abucheos y los gritos para Espósito, por lo que el representante opositor decidió retirar a toda su gente, tanto a los que estaban en el primer piso como en el anillo superior. Con la oposición afuera, el oficialismo dio sus discursos y dictámenes y terminó aprobando de manera unánime el ejercicio para el próximo año.
Bebote y sus casi 200 laderos, entre los que había barras de Doxk Sud y San Telmo convocados para el evento, festejaron el triunfo oficialista y se fueron con la tranquilidad del deber cumplido. Quedaron bien con Dios y con el Diablo…

lunes, 27 de septiembre de 2010

River - Este caso viene con cepa nueva



El último choque Borracho que dejó uno en coma viró de acusados: de la oficial a Los Patovicas.
Jonathan Waldemeier aún pelea por su vida. Desde el 24/5/10 está en coma por un choque entre los grupos que pelean por el poder en la barra de River. Ese día la Selección jugaba con Canadá en el Monumental, último amistoso previo al Mundial. Se sabía que Los Borrachos dirían presente y la fracción de Hurlingham fue a la General Paz a emboscar a la de Budge, que integra la barra oficial. La pelea presentó piedrazos de un lado y balazos del otro y dejó a Waldemeier, de sólo 24 años, malherido. La primera línea de investigación fue directo sobre los violentos de Budge, que viajaban en dos micros y estaban armados. Pero la familia de Johnny encaró una pesquisa por su cuenta y el lunes la madre la presentó en declaración testimonial ante la fiscalía. Ahí cambió el eje: la madre acusó a varios integrantes de Los Patovicas de Hurlingham, grupo que integraba su hijo, de haberlo agredido por supuestamente haberle vendido el dato de la emboscada a los de Budge. Tétrico.
La madre apuntó a siete barras identificados como Juanra, Chicho, Cucha, Martín, Ariel, Gallego y Leo, que ya estarían identificados en la Justicia con nombre y apellido. Y robusteció su declaración con un dato clave: aseguró que una mujer de apellido Coronel, que vive sobre la colectora de la General Paz a la altura de donde sucedió el hecho, le relató que se asomó a la ventana cuando escuchó el lío y vio que un grupo de personas traían arrastrando a un sujeto y que su marido le contó que ese mismo grupo había golpeado al herido. También afirmó que hace tres semanas la visitó en su trabajo una mujer que le contó que su hijo fue atacado por un barra de su propio bando llamado Ariel.
Para que esto tenga un efecto concreto ahora deberán presentarse los testigos, demostrar que no tienen interés en el resultado de la causa y ratificar todo ante la Justicia. Si eso sucede, el caso estaría en vísperas de su resolución.






jueves, 23 de septiembre de 2010

ESTUDIANTES - NEWELL'S Fue la noche sin barras

La Policía mandó de vuelta a Rosario a la barra de Newell’s y la de Estudiantes esta vez no apareció.

¿Argentina año verde? ¿Fútbol sin barras? Por lo pronto, anoche en el estadio de Quilmes, en el que hubo un operativo de 850 efectivos, no estuvieron la barra de Estudiantes ni la de Newell’s. En el caso de Estudiantes, la ausencia de las banderas y los trapos típicos confirmó lo que se veía venir: los integrantes de la barra no fueron porque estaban advertidos de que se les iba a aplicar el derecho de admisión. En el caso de los barras de Newell’s, la historia fue diferente. Los tres micros de la pesada rosarina fueron demorados por la Policía Vial en Zárate, cuando viajaban hacia Buenos Aires. En lo que parecía una requisa de rutina, los policías les pidieron las correspondientes entradas y los carnets de socios. Hasta ahí, todo normal, pero la situación cambió cuando les exigieron los documentos. Como nadie los portaba, llevaron a los micros hacia la comisaría y después de un buen rato, los hicieron volver a Rosario. Por otro lado, el Panadero, actual capo de la barra, no pudo llegar al estadio con su gente pese a que tenía las entradas que se habían vendido en el Parque

Boca - Durmiendo con el enemigo


Más pruebas de la relación entre policías, clubes y barras: la Federal ocultó imágenes de un procedimiento a La Doce que complicaba a Boca y a los violentos. Por esta razón, un juicio a uno de los capos y una causa clave podrían caerse.

La pelea contra la violencia en el fútbol sólo puede ser exitosa si todos los involucrados trabajan mancomunadamente. La Justicia hace su parte pero los clubes y policías, ya sea por miedo o connivencia, muchas veces terminan ayudando a quienes dicen combatir.

Olé accedió a documentos que demuestran cómo efectivos de la Federal direccionaron una investigación sobre La Doce para sacar del ojo de la tormenta a Boca y aliviar la situación de los barras. El hecho ocurrió el 5/10/08 tras el partido contra Estudiantes en la Bombonera. Ahí se detuvo a un auto de alta gama donde viajaban tres primeras líneas de La Doce. Entre los elementos secuestrados hubo cientos de carnets que utiliza la barra para ingresar y hasta para alquilarlos por partido. Pero esas imágenes, que complicarían al club y a la barra, no fueron incorporadas a la causa. ¿Por qué? Algunos dicen que existen miles de efectivas razones que no se explicitan. La Justicia sólo recibió una foto donde se ven apenas dos carnets y las armas secuestradas, que después serían inutilizadas rompiéndoles el martillo para que no fueran consideradas armas, aliviando así la situación de los violentos. En la instantánea del procedimiento se ve al jefe de Seguridad de Boca de entonces, el comisario Jorge Gómez, y algunos oficiales que participaron del operativo pero no aparecerían en el sumario. Esta imagen, sugestivamente, tampoco fue a la Justicia y ambas salieron a la luz en una conferencia contra la violencia en el fútbol que organizó el Partido Popular.

El tema, grave en sí, podría tener consecuencias nefastas. La causa contra el barra Oscar Otazú estaba elevada a juicio oral y había otra contra la Comisaría 24. Ahora ambas podrían caerse por las irregularidades de la Policía dejando todo en la nada. Increíble, pero tristemente real.




miércoles, 22 de septiembre de 2010

Newells - Ochoa, preocupado por la difusión de las imágenes de su ataque. El video






El actual líder de la barrabrava rojinegra, Diego Panadero Ochoa, se presentó ayer en los Tribunales Provinciales para ampliar una denuncia radicada la semana pasada por golpes y amenazas propinados por otros hinchas del club del Parque de la Independencia y manifestar su preocupación porque las imágenes del ataque, ocurrido mientras promediaba el primer tiempo del partido contra Independiente, en la noche del pasado sábado 4 de septiembre, se vieron por televisión y están en internet.
En su ampliación, Ochoa, de 35 años, dijo que su denuncia original fue fotocopiada y repartida por “todos lados”, haciendo referencia a los domicilios de testigos, programas televisivos y sedes policiales. En ese sentido, el jefe de la barrabrava de Newell’s manifestó en el Juzgado su preocupación de que haya trascendido un escrito estando la causa en secreto de sumario.
Además, el líder del para avalanchas rojinegro se mostró perturbado por las imágenes donde se ve cómo es sacado de la tribuna y golpeado, primero en la parte posterior de la misma y luego junto a los molinetes de acceso al estadio. También hizo mención a un segundo video, donde se ve cómo se roban una bandera que estaba guardada en el estadio, hecho por el cual es acusado Ochoa a través de foros de internet.
Ante esto, el juez de Instrucción de la 4ª Nominación, Juan Carlos Vienna, aseguró ayer que inició una investigación para esclarecer la situación y adelantó que está estudiando junto a un equipo interdisciplinario medidas cautelares restrictivas de ingreso a la cancha, que afectaría a las dos partes en conflicto.
El lunes de la semana pasada, el Panadero Ochoa, de 35 años, se había presentado en forma espontánea para denunciar agresiones físicas, amenazas y robo en el Juzgado de Instrucción en turno a cargo de María Luisa Pérez Vara. Pero como el hecho ocurrió días antes de la denuncia, la causa recayó en el despacho de juez Vienna.
Allí, el líder de la barra rojinegra denunció que mientras el club del cual es hincha disputaba el partido versus Independiente de Avellaneda en el Coloso, un grupo de hinchas a los que identificó con nombres, apellidos y apodos lo atacaron.
De acuerdo a sus dichos, tras propinarle una golpiza le robaron dos celulares, documentos, algo de dinero en efectivo y parte de la ropa que llevaba puesta. Ochoa dijo que estaba en la popular cuando “sin mediar palabra” lo corrieron con golpes de puño, patadas y palazos bajo el cántico que “la cancha era de ellos”, dijo una fuente judicial.
Los dirigentes del club del Parque Independencia presentaron videos donde habría sido filmado el momento en que se enfrentan los hinchas de la misma camiseta y corren de la popular al actual líder de la barra, que fueron reproducidos por televisión abierta y en varios sitios de internet.
Voceros judiciales indicaron que mientras se siguen realizando diligencias sobre el hecho registrado en la noche del sábado 4 de septiembre, la Justicia evalúa la posibilidad de prohibir el ingreso a la cancha tanto del denunciante como de los imputados.
La pelota a la Justicia
El secretario del club del Parque Independencia, Pablo Morosano, aseguró que la institución está obligada a extremar los cuidados para que la gente pueda ir tranquila a la cancha mañana ante Estudiantes, pero apuntó hacia la Justicia, al mencionar en Radio 2 : “(la Justicia) nos tienen que decir quiénes son los responsables que están vinculados con los grupos que integran esta interna con antecedentes penales. Lo que necesitamos es que nos digan quiénes son y no aplicar derecho de admisión contra cualquier persona”. Dichas declaraciones fueron efectuadas en relación a las imágenes registradas por las cámaras de seguridad del club, que fueron entregadas a la Policía y a la Justicia.
En tanto, El jefe de la Policía de Santa Fe aseguró que la dirigencia del club tiene responsabilidad en lo que ocurre en las tribunas. “Este es un problema institucional. Yo estuve dos años en la Jefatura (de Policía) de Rosario y conozco el problema bastante bien, una parte de los que hoy forman los grupos denominados «barras» eran los mismos que tomaban la sede de forma violenta”, aseguró Osvaldo Toledo, en referencia a los reclamos que hicieron meses antes de las elecciones en las que fue derrotado Eduardo López.

Rosario: robaron las banderas de Newell's y se desató la polémica. El video y las fotos.





Varias personas ingresaron al estadio Marcelo Bielsa y se llevaron "trapos" de la institución. Algunos hinchas de Central se adjudicaron el robo por internet, pero la Policía también sospecha de una violenta interna entre barras de la "Lepra"

La rivalidad entre Rosario Central y Newell's sigue sumando páginas y en esta oportunidad surgió un video en donde se puede observar a varios individuos ingresando al estadio Marcelo Bielsa para llevarse banderas de la institución.

El equipo rojinegro está en medio de una violenta interna, entre Diego "Panadero" Ochoa y Matías Pera , y a esto se suma el robo de las banderas. La situación tiene larga data y no son pocos los aseguran que la pelea se debe al control de la droga en la ciudad.

Además, el grupo de personas que ingresó al Coloso del Parque se llevó el "trapo" que la hinchada local muestra en su popular con la frase "40.000 de visitante" (por la gente que llevaron a la cancha de Independiente al lograr el título del 2004), y luego divulgaron varias fotos por internet.

Fernando Llorente, presidente la "Lepra", habló sobre el tema y aseguró: "Inmediatamente después de que ocurrió el hecho hicimos una presentación en la seccional. Este hecho podría ser un generador de violencia, en la que esperemos que no ocurra".


En Rosario ya se habla de una posible "venganza" de parte de los simpatizantes de Newell's, aunque nadie confirmó la identidad de los ladrones, y las amenazas en entre las facciones podría terminar de la peor manera.

SAN MIGUEL | COMO EN EL FAR WEST “Me dijeron: ‘renunciá o te lastimamos’”




Armando González dejó de ser el DT del Trueno tras una fea apretada de la barra. Y se fue media CD.

San Miguel es un polvorín. El club vive su proceso de quiebra y el fútbol quedó atrapado por la ley del far west, donde mandan los violentos que como en un viejo western, salieron a aterrorizar a todos. Y tras dos apretadas consecutivas y una amenaza directa, lograron la renuncia de Armando González como DT del Trueno. La primera historia ocurrió el jueves cuando 12 barras del grupo La Plazoleta, que desplazó a los históricos del barrio Del Sol, apareció por el vestuario y amedrentó al plantel con un “si no le ganan a Laferrere, cobran todos”. El domingo, y a pesar de haber jugado un buen segundo tiempo, San Miguel perdió. Y los barras volvieron con el capo, Lito, a la cabeza. Esta vez encararon al DT y le dijeron que debía irse. Ante la negativa de González, fueron directos: era renuncia o atenerse a las consecuencias.

“Llegaron 40 minutos después del partido. Eran 10 y yo estaba con dos jugadores. Querían charlar detrás de la tribuna pero vi cómo venía la mano y les dije que no. Ahí el que llevaba la voz cantante me dijo que debía renunciar. Le expliqué que la actitud del equipo en el ST me había dejado tranquilo y que en todo caso, ese era un tema de los dirigentes. Se río y me aseguró: ‘Acá mandamos nosotros, o todavía no te diste cuenta. Si para el martes no te fuiste, te lastimamos. Sabemos dónde vivís y cómo se mueve tu familia’. Los dirigentes me apoyaban, el plantel también, pero ante esto... les hice frente hasta que pude, pero vivo en el barrio, veo cómo se manejan y no soy un mártir. Tengo impotencia, pero primero está mi familia. Lograron meterme el miedo adentro”, le dijo González, en forma de catarsis, a Olé .

La situación de anarquía es tal que ante lo sucedido también se fueron los vicepresidentes Bulacio y Flores y el secretario Coria. El trasfondo es que la barra se lleva del fútbol entre seis y siete mil pesos y quería aumentar su cuota al doble. Ante la negativa, decidió boicotear a la actual conducción para poner gente afín a ellos que cumpla con sus expectativas. En el pasado le hicieron lo mismo a Claudio Ramos, un inversor externo del club. Ayer el plantel entrenó sin técnico. Y hoy varios jugadores podrían anunciar que dejan un club dominado por la barra brava.

martes, 21 de septiembre de 2010

River - Identikit de una interna feroz

Quiénes atentaron contra el amigo de Passarella. La pelea por el poder. Negocios sin código.



Queremos los 50.000 dólares que nos debés. ¡Sacá la plata, vamos!. Si no, cuidá a tu familia". Cuando Ricardo Cosentino escuchó la amenaza el viernes 1 de junio, tembló. "No tengo nada. Les juro que no tengo nada. Si quieren, llévense todo lo que hay adentro", respondió. Lo increpaban en el palier del edificio donde vive, en Estomba 2650, cinco hombres que se comunicaban con handies. Preparados para todo y repletos de músculos. Fueron diez minutos que a Cosentino se le hicieron eternos. Hasta que los cinco hombres se juntaron con el resto de la banda, que hacía de campana en la puerta del edificio. Blandieron un par de armas para asustar a algún vecino que quisiera pasarse de valiente. Y se fueron sembrando miedo. Mucho miedo.
El modus operandi de la barra de los diez que atracó el edificio donde vive Cosentino remite sin escalas a la interna profunda de los Borrachos del Tablón, la barra brava de River. Esta historia de musculosos con nombres de serie norteamericana –Alan, William, Kevin– patovicas expertos en artes marciales que se comunican por handy y son habitués de las pintadas, las apretadas y los mensajes mafiosos, comenzó el fatídico 11-F en los quinchos del club. Ahora, amenaza con expandirse, generando una reacción en cadena que nadie sabe dónde parará. Ni los dirigentes del club ni, mucho menos, la Policía.
El ataque a Cosentino es la punta de un iceberg, el de un proceso de selección natural en el que está en juego el poder en la barra. Un negocio que movería, según pudo averiguar NOTICIAS, entre 30 y 40 mil dólares al mes. "Es la ley del más fuerte. Y los que quieren ocupar el lugar de Alan (Schlenker) y Adrián (Rousseau) van a hacer lo imposible para demostrar que tienen con qué", dice un allegado a la barra.
Interrogantes.
La pregunta es por qué eligieron a Cosentino. Y, después, quiénes fueron los que pidieron esa tajada de 50.000 dólares a ritmo de pistolas y bíceps. Ricardo Cosentino es un íntimo amigo de Daniel Passarella, técnico del equipo. Lo acompañó en varias de sus experiencias internacionales –e incluso llegó a formar parte del cuerpo técnico de la Selección uruguaya–, y le consiguió fabulosos contratos en el extranjero, como por ejemplo en el Parma italiano. Hoy, Cosentino es la mano derecha del entrenador, quien quiso contratarlo como gerente de fútbol de River no bien el ex zaguero de la Selección aterrizó en Núñez. La negociación se truncó por el actual trabajo de Cosentino: asesor futbolístico del intermediario Fernando Hidalgo. Y por un sueldo mensual que sería de alrededor de 20.000 dólares. Imposible para las arcas de River, un club que, según palabras de su presidente, José María Aguilar, "necesita vender por 12 millones de dólares al año para equilibrar sus cuentas".
El vínculo Hidalgo-Cosentino es la llave para entender por qué los barras habrían ido a buscarlo. Los últimos grandes negocios de River fueron realizados a través de un club suizo llamado Locarno. Hace dos semanas, Aguilar reconoció a NOTICIAS que River le vende jugadores a un intermediario, el israelí Pinhas Zahavi. El Locarno es el club satélite usado por Zahavi como depositario de jugadores. En la Argentina, Zahavi forma parte de HAZ Sports Group, en donde uno de los socios es Fernando Hidalgo. Y en este punto es donde aparece Cosentino: el ataque del viernes 1 habría funcionado como pedido para que el hombre libere los 50.000 dólares que serían para la barra de River. Se los habrían prometido en ocasión de la venta de Gonzalo Higuaín, Fernando Belluschi y tres juveniles al club suizo, en agosto del 2006. Además, los barras ya hicieron su trabajo: los que presionaron en la reunión de la Comisión Directiva para que se firmara la transacción de los jugadores fueron Adrián Rousseau, Gonzalo Acro, Cristian Ghisletti (alias "Cristian del Oeste") y Alexis Alan Decoste (alias "Gordo Neurona"). ¿Qué tienen en común Acro, Decoste y Ghisletti? Los tres eran empleados del club. Acro y Decoste pertenecían al área de mantenimiento y tenían sueldos que orillaban los $ 5.000 mensuales. "Eso fue gracias a una cantidad exagerada de horas extras", se justificó ante NOTICIAS el presidente Aguilar. Ghisletti, por su parte, revistaba en el área de seguridad y control.
Además, estos tres barras comparten su lealtad hacia Adrián Rousseau, el más violento de los dos líderes históricos de los Borrachos del Tablón. La logística del "operativo Cosentino" –con handies, armas y hombres que hacen de campana afuera del edificio– remite al grupo de Adrián Rousseau, enfrentado a muerte con Alan Schlenker desde el 11-F. Sin embargo, el propio Adrián lo niega: "Ni en pedo me meto en un quilombo así. Imaginate la cantidad de días que puedo terminar preso", le habría dicho Rousseau a un hombre del club. Si ellos no fueron, ¿quiénes?


Estudiantes - Balas y piedras entre barras, con un infiltrado en la foto




La disputa por el liderazgo de la barra brava en Estudiantes no suma capítulos unitarios sino que de a pares va marcando el pulso de una historia nefasta. El fin de semana, claro, dejó escritos dos nuevos párrafos manchados de violencia que amenaza con tener nuevos episodios tremendos con un final cada vez más lejano y cruel.
La parte sangrienta sucedió entrada la noche del sábado, cuando en Tolosa dos encapuchados le metieron al menos dos balazos al ex líder de la barra “Los Leales”, Omar “el Hache” Alonso, quien ahora se repone en su domicilio tras haber sido atendido en el hospital San Roque, de Gonnet. También hizo la denuncia policial.
Por otro lado, antes de comenzar el partido entre All Boys y Estudiantes hubo corridas y enfrentamientos callejeros entre un sector de la barra albirroja con sus rivales de Floresta. Allí, algunos intentaron robarle la camiseta a un hincha de All Boys y luego se desató la violencia. Una fotografía del momento dejó expuestas a dos personas, una de las cuales sacaba un arma de fuego de su campera.
Los hechos no estarían necesariamente conectados. Los que conocen a fondo la interna de la barra pinch a dicen no haber visto al Hache en cancha de All Boys, como así tampoco a sus eternos rivales el “Gato” Adrián Socio o el “Morsa ” Rubén Montero. Pero sí estaba la segunda línea de la barra liderada por Socio. Habían ido en dos micros aparte de la caravana por un recorrido alternativo, provocaron una revuelta a piedrazos con hinchas de All Boys y aprovecharon la corrida para colarse en la tribuna visitante sin que fueran detectados por la policía.
Uno de los dos individuos fotografiados por Crónica extrayendo un arma de su campera es apodado Toto, tiene 25 años y no registra antecedentes. Es un novato entre los pesados de la tribuna y formaba parte de la avanzada de hinchas que chocó en el enfrentamiento callejero con sus rivales de All Boys, y que luego ganó un lugar dentro de la tribuna visitante donde después, y a la vista de todos, se cambió la remera para no ser reconocido.
La otra persona que se ve en la foto no tiene nada que ver con el grupo de violentos de La Plata. Según comentaron, tras micrófonos, miembros de la investigación “es un efectivo de civil” . Es que, de acuerdo a lo que explicaron, varios policías fueron asignados para tal tarea, a la vista de que la barra de Estudiantes es una de las más conflictivas del fútbol argentino. Por eso, claro, el asombro de algunos presentes que vieron al hombre, miembro de la Comisaría 43°, hablando por celular frente a los efectivos que vigilaban el operativo sin que éstos lo advirtieran. En suma, se trata de un policía infiltrado en la barra.
Las voces oficiales se multiplicaron para dar sus impresiones y sus explicaciones del caso.
“Nosotros tratamos de articular la tarea con la gente de la jurisdicción de la Ciudad de Buenos Aires. Tal vez la dificultad la tengan por no conocer tan bien a los violentos. Los barras tratan de aprovecharse de eso a veces cuando van de visitante y generan incidentes” , explicó Rubén Pérez, titular del Coprosede.
Desde el Subsef, explicaron que están recolectando los informes de las fuerzas a cargo para “establecer sanciones claras al respecto”. Las medidas incluirán el agregado de los partícipes al derecho de admisión, aunque dijeron que “de ninguna manera se sancionará a los clubes”.
La pelea en Floresta y el tiroteo de Tolosa se enmarcan en una interminable disputa de poder por el liderazgo de la barra que casi siempre se dirime a puro balazo y con los mismos protagonistas.
Recortadas sus andanzas en cancha de Quilmes donde Estudiantes juega de local porque la policía les prohíbe la entrada, buscan protagonismo siempre que juegan de visitante. Incluso, llegaron a agarrarse en un acto político del candidato Pablo Bruera, en el Luna Park. Es que la interna de la barra puede abrir una nueva batalla en cualquier terreno. Por eso, hay algunos que temen nuevas crónicas en el partido con Newell´s, por la Sudamericana, mañana.

lunes, 20 de septiembre de 2010

Newells - Quién es quién en la interna de los barrabravas de Newell's Old Boys



La hinchada de Newell's está en la mira de los dirigentes del club y de la justicia ordinaria. Desde ambos sectores en los últimos días se elaboraron listas de reestricción de ingreso para evitar choques violentos. Pero la guerra sigue. Hasta visitaron a "Pillín". Reproducimos lo que publica hoy Rosario/12.
    
La violencia que rodea a la barrabrava de Newell's se agita por motivos que exceden los intereses que se ponen en juego al lidiar por el peldaño más alto de la popular. Bandas enfrentadas dirimen su lugar de poder en la tribuna rojinegra, debiendo asumir la institución la responsabilidad de pacificar a sus hinchas irracionales, labor que en los últimos días contó con la complicidad de la propia Justicia, que actuó con decisión para restringir el ingreso de los peligrosos simpatizantes.

Pero en los enfrentamientos entre facciones antagónicas hay en juego el control de diferentes barrios de la ciudad, algunos de los cuales son claramente identificados por la policía por la actividad de delitos vinculados con la venta estupefacientes. Los hermanos Vázquez buscan el dominio de la hinchada, para lo cual trazaron acuerdos entre las sombras con quienes eran los hombres de confianza de Diego "El Panadero" Ochoa, abriéndose entonces una batalla que le devolvió protagonismo incluso a Pedro "El Loco Demente" Bismark.

Cuando Matías Pera, Sergio "El Quemado" Rodríguez y Gabriel "Virus" Sottomano atacaron por la espalda a Ochoa, durante el primer tiempo del partido con Independiente, la conspiración tramada por los hermanos Vázquez para tomar por asalto el poder de la barra había llegado a los hechos.

Sergio "Teto" Vázquez y Daniel "Chamala" Vázquez son figuras conocidas por su aproximación de los hermanos Cantero, identificados en la zona sur como uno los principales proveedores de drogas de la ciudad. A los Vázquez se les adjudica un poder económico de proporciones: las torres construidas en Bv. Segui y Maipú y Gaboto y Maipú, según aseguran en "La Granada", barrio emplazado en España al 6000. "Esos edificios son de `los gordos'", como se los nombra peyorativamente a los líderes de la zona.

"Los Vázquez tenían un acuerdo de convivencia con los hermanos Camino, por eso antes no se metieron con la barra de Newell's", apunta a Rosario/12 uno de los hinchas alinearon detrás de quienes agitan la salida de Ochoa. "Los Vázquez tienen su negocio acá, los Camino lo tenían con Newell's. Cada uno en sus cosas, así convivieron y se respetaron", apunta el joven barra leproso, que luego se exalta para enfatizar que el jueves "corrimos a los tiros a los del `Panadero' en el parque Independencia".

DISPAROS EN EL PARQUE

Minutos antes de las 16 del último jueves, día en que Newell's jugó en el Coloso con Estudiantes por Copa Sudamericana, tuvo lugar en la zona del Rosedal el primer enfrentamiento armado de los barras rojinegros. Los "fieles" a Ochoa se movilizaban en varios camiones y en caravana, aunque disimulaban el desfile de la hinchada intercalando autos particulares entre los vehículos de mayor porte que trasladaba al gran número de los hinchas por Bv. Oroño. Al llegar a calle Cochabamba al primer camión de la barra se le aparecieron por la zona del parque más de cincuenta violentos identificados con los "rebeldes" al "Panadero", lanzando piedras y disparos al aire. De los camiones se bajaron más de un centenar de "fieles" que contestaron los disparos, repeliendo a los agresores, quienes ganaron el parque por la zona de Gimnasia y Esgrima. "Yo vi dos heridos de bala, pero se los llevaron a tiempo", confesó uno de los violentos que participó en la reyerta. "Había poca gente armada. Como la requisa para ingresar a la cancha iba a ser muy rigurosa, los que van enfierrados es gente que llamamos `hinchas de apoyo', que no ingresan a la cancha pero garantizan el traslado de la gente, incluso luego del partido", explica un ladero de Ochoa.

Cuando la policía apareció en el lugar improvisó una redada que terminó con la detención de un `perejil'. Demoraron a Fernando Romero, un remisero de Villa Gobernador Gálvez que traía hinchas al Coloso que responden al mando de Ochoa. Romero quedó detenido en la Comisaría 5ª, donde la policía le aseguró que fue identificado por testigos como uno de los que lanzaron tiros al aire. Luego de "largas charlas con la policía" el trabajador al volante recuperó su libertad.

LA VISITA A "PILLÍN"

Fue la propia policía la que el día siguiente a que bajaron a Ochoa a las trompadas del paraavalanchas anunció que la barra de Newell's tenía nuevo líder. "El Quemado" Rodríguez y Matías Pera eran los sucesores de la popular, quienes responden a las decisiones de los hermanos Vázquez.

En primera acción como barras triunfantes, Rodríguez y Pera visitaron a Andrés "Pillín" Bracamonte en la Comisaría 9ª, donde cumple condena el capo de la tribuna de Central. "Bracamonte les dijo que para darle el golpe de gracia a Ochoa había que robarle las banderas. Y eso dejamos que pase", precisó un veterano de la popular rojinegra alineado con los "rebeldes" porque "Ochoa vende las entradas y no reparte nada". "Pero el trabajo lo hicieron ellos (por los canallas) -acota-; nosotros sólo les garantizamos el éxito de la movida".

En la madrugada del martes 7 de setiembre las cámaras de seguridad de Newell's registraron cómo en menos de dos minutos tres jóvenes ingresaron al galpón donde se guardan las banderas de la hinchada y se llevaron el extenso trapo que reza "40.000 de visitante". La seguridad privada del club y el oficial de policía que vigilaba las instalaciones por los monitores nada vieron. Días después, el video con la riña de los violentos en el partido ante Independiente, que estaba en poder de la policía, se dio a conocer por los medios. "Todo el mundo vio como salió Ochoa de la cancha. Y luego circuló el video con los canallones desplegando la bandera afanada. Después de esto Ochoa no existe más", espetó otro de los violentos que le declaró batalla al "Panadero".

Pero por la denuncia presentada por Ochoa por la agresión que sufrió en la popular, luego Pera y Maxi "El hijo del Quemado" Rodríguez fueron detenidos y trasladados a la Comisaría 4ª, a cargo del Inspector de Zona Daniel Cabrera, en vez de ir a la Seccional 5ª, con jurisdicción en el parque Independencia.

LA RESURRECCIÓN DEL "LOCO DEMENTE"

Desde que "Pimpi" Camino lo echó a los tiros de la popular, seis años atrás, Pedro Bismark decidió dejar los hábitos de los violentos. Su lugar en el Coloso pasó a estar en la platea, sin siquiera aspirar a volver al paraavalanchas una vez caídos en desgracia los hermanos Camino en las elecciones que expulsaron a Eduardo López del gobierno.

Pero ante una propuesta de los Vázquez, el "Loco Demente" regresó a la andadas. El primer acercamiento con quienes dominan "La Granada", barrio del extremo sur de la ciudad, se produjo en el mes de julio, cuando "Teto" y "Chamala" Vázquez le ofrecieron una vivienda a Bismark para que allí se instale, ubicada en el Pasaje 516 a la altura de 6327.

En ese domicilio vivía Juan Mendoza, que se desempeñaba como seguridad de un súper chino ubicado en España 6300, lugar donde el 17 de junio asesinó a Emanuel Carrizo, en un confuso episodio, donde aún está por dilucidarse si el crimen se produjo en el marco de un intento de asalto al comercio. "Cuando cayó en cana, a Mendoza le quemaron el auto y le ocuparon la casa. Ahora vive el "Loco Demente" ahí", relató un vecino, que además añade que "al Loco también le dieron un auto nuevo".

Estudiantes - Los barras "pistoleros"





Barrabravas de All Boys y Estudiantes de La Plata se enfrentaron en Floresta, más precisamente en Avenida Álvarez Jonte y Bahía Blanca, a una cuadra del estadio Islas Malvinas y minutos antes del partido que terminó en la victoria del equipo local. 

Todo comenzó cuando el micro de la hinchada platense tomó un recorrido inesperado y sus integrantes quedaron prácticamente enfrentados -distanciados por 200 metros y algunos de los 300 efectivos policiales dispuestos para el partido- a los barras del "Albo", que habitualmente "paran" en la calle Álvarez Jonte.

Según el informe publicado por el diario Crónica, los disturbios principales se produjeron al llegar a la calle Bahía Blanca. Los violentos se hicieron de baldosas y piedras para atacar y decenas de autos terminaron prácticamente destrozados. 

Sin embargo, como se puede apreciar en las fotografías, también hubo armas de fuego,que al final no fueron utilizadas. Tampoco se registraron detenciones. Así y todo, el jefe del operativo, subcomisario Juan Manuel Esquivel, expresó su satisfacción por el accionar de los efectivos.


Se recrudece la interna en la barra "pincharrata"

En la noche del sábado, cerca de las 22:30, dos hombres presuntamente encapuchados se acercaron al ex jefe de la barra brava de Estudiantes, Omar Ángel "El Hache" Alonso, y uno de ellos disparó directo al cuerpo en al menos dos oportunidades





Los atacantes escaparon y ayer al mediodía la víctima realizó la denuncia en la sede de las fiscalías platenses, consigna el diario El Día. Ahora resta determinar si el hecho está relacionado con la "guerra" por el control de la barra de Estudiantes.

Alonso sufrió al menos dos lesiones por los disparos, una en un brazo y otra en una pierna.La causa fue caratulada como "abuso de arma y lesiones". 

Newells - Dos barras detenidos con un arma de fuego frente al Coloso

La policía les secuestró un revolver y quedaron demorados en la comisaría 5ª. Le robaban a la gente en la previa del partido de Newell’s. Sin embargo, en el marco de la interna de la hinchada no se registraron incidentes
Dos personas terminaron detenidas este domingo a la tarde por portar un arma de fuego en las inmediaciones del estadio de Newell’s, epicentro de varios hechos de violencia por parte de la hinchada rojinegra en los últimos días.

Fuentes policiales informaron que, cerca de las 14, en la previa del partido ante River, un hombre denunció ante los oficiales –que realizaban el operativo en la zona– que dos sujetos lo asaltaron a mano armada y le sustrajeron las zapatillas y una riñonera con dinero.

A raíz de la descripción de la persona robada, los agentes procedieron a revisar un grupo de unos 60 hinchas que estaban en la zona del Jardín de los Niños y se aprestaban a ingresar al Coloso. Allí secuestraron un revólver calibre 22 y detuvieron a dos hombres.

No obstante, desde la comisaría 5ª –con jurisdicción en el área del parque Independencia– aseguraron a Rosario3.com que, teniendo en cuenta la gravedad de los últimos hechos registrados en el marco de la interna de la barra, la jornada fue tranquila y el operativo resultó exitoso.

Velez - La guerra de los violentos




La guerra de los violentos de Vélez, a full: le pegaron al ex jefe, Marcos, y hubo tiros frente al club.
Una va a la Villa Olímpica y se nota que Vélez es un club modelo. Uno camina por el Polideportivo, y entiende por qué buena parte de la zona Oeste de Capital y Gran Buenos Aires elige hacerse socio del club de Liniers. Pero en lo que hace a su barra brava, la política de Vélez no escapa a las generales de la ley. Le dieron cada vez más concesiones y el monstruo creció hasta hacerse incontrolable. Y lo que muchos decían que no sucedería, pasó: hace varios meses La Pandilla tiene una interna que sigue in crescendo y nadie sabe donde puede terminar. El mes pasado hubo una pelea en la confitería del club que terminó con un tiroteo en la puerta, y en la madrugada del jueves tras el partido por Copa Sudamericana contra Banfield, pasó lo mismo: se armó en la tribuna y después hubo lío en las cercanías del Amalfitani, con disparos incluidos.
El incidente comenzó en la cancha cuando Marcos, que perdió el paravalanchas poco antes del Mundial (justo cuando se bajó su coequiper, el Tano, para dedicarse a la política), empezó a agitar a la gente que estaba a su alrededor. Ahí uno de los nuevos capos, Pedro, que integra la ONG de barras kirchnerista Hinchadas Unidas Argentinas, lo enfrentó y lo dejó maltrecho. En inferioridad de condiciones, la gente que le responde a Marquitos decidió tomarse revancha afuera. Y en la madrugada, un familiar suyo apodado el Chino fue hasta donde estaba reunida la flamante jefatura y habría disparado dos tiros a modo de intimidación. Esta noche Vélez va a defender su liderazgo a la cancha de Arsenal. El clima está caldeado y la CD, jugando con fuego, sigue sin incluir a la barra en el derecho de admisión.

All boys - Estudiantes: Una tarde a los tiros



El partido entre All Boys y Estudiantes quedó marcado. Más allá del resultado que acusa el marcador (triunfo 2-1 del Albo), el encuentro tuvo un capítulo nuevo en la historia de la violencia en el fútbol. Y esta historia la protagonizaron las hinchadas del Pincha y del club de Floresta.
El enfrentamiento entre los hinchas de los mencionados equipos se produjo a una cuadra de la cancha, en la intersección de las calles Álvarez Jonte y Bahía Blanca. La gresca se originó por el recorrido inesperado que tomó el micro que trasladaba a los hinchas platenses: se metió en pleno territorio del Albo (sobre la calle Álvarez Jonte siempre se concentra el grueso de la hinchada de All Boys), en busca de llegar a la cabecera visitante de la cancha. Así las cosas, ambas parcialidades quedaron enfrentadas (con una trayecto promedio de 200 metros) y apenas distanciadas por algunos de los 300 efectivos policiales destinados al operativo policial.
El resultado: caos, lluvias de piedras entre un bando y el otro, corridas, alrededor de 10 y 15 autos destrozados, disturbios generalizados y… Miedo. Es que al menos dos de los simpatizantes del Pincha, en pleno momento de tensión y de intercambio de proyectiles, empuñaron respectivas armas de fuego. La fotografía publicada por el diario Crónica muestra como dos barras exhiben sus armas en el momento de más tensión. Lo cierto es que, por suerte, los revólveres no fueron utilizados.
Lo llamativo y, si se quiere, lo más paradójico, es que el Jefe del operativo (Subcomisario Juan Manuel Esquivel) expresó su satisfacción por el accionar de los detenidos… Además, según fuentes de la comisaría 43 (con jurisdicción sobre la cancha de All Boys) confiaron que no se registraron detenciones ni personas demoradas… Una historia más, que puede tener un final diferente. Las fotos muestran rostros que la justicia podría identificar. ¿O no?


viernes, 17 de septiembre de 2010

EL PORVENIR - 60 barras y un funeral



¡Increíble pero real! Quisieron despedir a un hincha muerto en la cancha, le pegaron al plantel, robaron, hubo denuncia sin detenidos. Hot...

Aunque usted no lo crea, lamentablemente la siguiente historia es real. Es tan bizarra que hubiera asombrado hasta al mismísimo Federico Fellini. Eran las 10.30, estaba por terminar la práctica matutina del equipo cuando apareció un cortejo funebre. Era el de Javier Suldini, un hincha de El Porve al que antes de ser sepultado, querían que fuera despedido por el plantel. El grupo de 60 violentos irrumpíó y tres de los más calmados empezaron a dialogar con Mariano Valentini. El DT lo hacía con total tranquilidad, pero de repente algunos que estaban bastante sacados, comenzaron a gritarle al grupo por la mala campaña. De los insultos pasaron a las agresiones a los integrantes del cuerpo técnico y también a los jugadores. Cuando terminó el bochornoso espectáculo, se fueron al cementerio. ¡Increíble pero real! Un integrante del plantel que prefirió el anonimato contó que “vimos sorprendidos, parecía una tragicomedia, cómo ingresaban por el portón dos coches fúnebres y un montón de personas. En eso se aproximan tres de ellos que eran de la barra, para pedirnos que le diéramos el pésame y el último adiós por parte del plantel al hincha que se murió un día antes... Los demás estaban borrachos, drogados y empezaron a insultar. Se exaltaron cada vez más y se mandaron para la cancha. Gustavo Espinosa (AC) intentó frenarlos pero se lo llevaron puesto y le empezaron a pegar. Se vinieron, fue una batalla campal. Los jugadores no reaccionaron, porque si no era una masacre. Y a todo esto, los coches fúnebres con el cádaver en el playón de la cancha... La sacamos barata porque estabámos a la buena de Dios”.

Ana Veliz, secretaria del club, agregó: “Le rompieron la cabeza a un juvenil de 15 años (Nicolás Marquievich), entró un loco con una moto a la cancha para correr a los jugadores y otro que tenía un casco le pegó al chiquito. Yo los vi llegar, cerré el portón pero cinco bestias lo tiraron abajo. Intenté frenarlos aunque me pasaron por encima. Por eso decidí hacer la denuncia policial”. Algo que también efectuó el técnico Valentini. Otro jugador contó: “Murió un hincha y los barras vinieron a hablar. Y además se robaron ropa de utilería que había en los bancos de suplentes”.


El presi Enrique Merelas no estaba en el momento del hecho vandálico, pero luego se reunió en la AFA con Rubén Pérez (capo del Coprosede) y Julio Grondona. Y dijo: “Ingresaron estas personas al club e hicieron un desastre. Para mí es muy duro, hice muchas denuncias contra los violentos y nunca pasó nada”. Y agregó: “Estoy entregado. Entraron con una moto, les pegaron a los jugadores. Hablé con Pérez y se tomaron todas las medidas: va a haber custodia permanente en los entrenamientos, la concentración y los partidos, y no se venderán más entradas para los partidos durante todo el año. Podremos seguir jugando en nuestra cancha”. Sí, todo esto pasó en Gerli.

jueves, 16 de septiembre de 2010

Newells - Enfrentamiento de barras y disparos en las cercanías al estadio de Newell's

Alrededor de las 16, dos grupos de hinchas de Newell's se enfrentaron en la intersección de bulevar Oroño y la continuación de Cochabamba, en la que se escucharon dos detonaciones de armas de fuego.

El inicidente generó la rápida intervención de la policía que estaba en las inmediaciones del estadio, lo que evitó que el enfrentamiento cobrara más dimensión.

De hecho, la llegada casi inmediata de cinco móviles policiales (cuatro autos y una camioneta) hizo que los hinchas se dispersaran, al tiempo que los uniformados retuvieron en las cercanías del lugar, donde tuvo el choque entre las fraccciones de la barra, a alrededor de casi 30 hinchas.

Los que, luego de no hallarle armas, fueron identificados y luego los liberaron para que siguieran su camino hacia el estadio Coloso "Marcelo Bielsa", mientras los policías seguían recorriendo las inmediaciones para tratar de dar con el paradero de las personas que portaban las armas de fuego.

Cabe acotar que a partir del enfrentamiento que se suscitó en la popular entre barras de Newell's en el partido ante Independiente, había muchas versiones de que los choques entre las facciones en pugan se volvier a producir. Para eso, la policía de la provincia había montado un importante operativo para la previa y el encuentro de esta tardecita entre Newell's y Estudiantes, por la Copa Sudamericana, sin embargo no pudo dar con los responsables de los disparon del arma de fuego.

Por lo pronto, y pese al operativo desplegado en el lugar, hasta hace minutos en la Comisaría 5ª no tenían noticias del incidente que se había producido en las inmeidaciones del estadio.

Barras bravas ensoberbecidas




 Los incidentes del sábado pasado se contradicen con la consideración que dispensa Julio Grondona a los barrabravas
Al presidente vitalicio de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Julio Grondona, no le preocupan en exceso las críticas, pues las encuadra en su frase favorita: "Todo pasa". Pero haberles facilitado una entrevista personal a los dirigentes de la organización denominada Hinchadas Unidas Argentinas (HUA) excede el límite de la paciencia de una sociedad que, en su mayor parte, considera que las barras bravas son una lacra dentro del fútbol y fuera de él.
Sobran los fundamentos para darle sustento a ese duro y justificado criterio. Pero por si hiciese falta otro, basta con mencionar los incidentes ocurridos durante y después del encuentro que sostuvieron el pasado sábado San Lorenzo de Almagro y Vélez Sarsfield.
Una alocada rivalidad, teñida por cruentos antecedentes, volvió a demostrar la irracionalidad de las respectivas barras bravas. Los desafíos vertidos desde ambas tribunas degeneraron en choques, riñas enconadas, represión policial y espectadores ajenos al hecho que en vano trataron de mantenerse al margen del incidente.
Al final, un simpatizante de Vélez internado con traumatismo de cráneo, otros magullados o afectados por los gases lacrimógenos y varios ómnibus apedreados fueron el saldo triste de la confrontación de ambas bandas desatadas.
Son bárbaros que transitan por el filo del delito mismo, si es que no están ya incursos en él. Por supuesto, no es ésa la interpretación que de sí mismos sustentan los delincuentes de las tribunas, autoconsiderados integrantes imprescindibles del mundo del fútbol y, por ende, merecedores de atenciones y privilegios especiales.
Hace ya algunos días, ocho representantes de HUA pudieron acceder a la biblioteca de la AFA y dialogar allí mano a mano con dos dirigentes. Después, fueron recibidos por el propio y eternizado titular de la entidad madre de nuestro fútbol y, al margen, vicepresidente primero de la Federación Internacional de Fútbol (FIFA).
Los barrabravas, es sabido, suelen presentarse como angelicales e incomprendidos aficionados que, por azar de aires adversos, no son comprendidos por el resto de la gente. Cobijados tras esa falsa e hipócrita bandera, los que son simpatizantes de clubes de primera B ahora reclaman que se les permita concurrir a los cotejos en que sus equipos favoritos juegan en calidad de visitantes.
Esa modalidad les ha sido prohibida después de que fueron protagonistas de numerosos escándalos. Así y todo, sumaron a ese insólito pedido la descabellada posibilidad de que los barrabravas locales se comprometiesen a recibirlos, acompañarlos hasta la tribuna y despedirlos desde el comienzo de cada cotejo hasta su finalización.
No es extraño. Ya nada que propongan esos representantes de la violencia puede asombrar. Algunos militantes de HUA son los mismos que hicieron de las suyas en el reciente campeonato mundial de fútbol de Sudáfrica y, también, quienes hace poco reclamaron que la AFA y los clubes los reconociesen como guías y acomodadores de los estadios.
La encubierta relación con algunos políticos, a los cuales les sirven de mano de obra barata; con los dirigentes del fútbol, como salta a la vista con hiriente franqueza, y con los propios futbolistas, víctimas propicias de sus exacciones, ha engordado la soberbia de esas bandas que han dejado atrás la mera marginalidad y se están convirtiendo en francamente delictivas. Desgraciadamente, la indebida atención que les ha dispensado el titular de la AFA, Julio Grondona, los ensoberbecerá aún más. Así lo han demostrado, por si cupiesen dudas, los incidentes del último sábado.

Newells - Robos y droga en una interna feroz



No hay caso. La violencia parece estar grabada a fuego en la barra de Newell´s. Es que allá lejos, bien lejos, parece haber quedado la aparente paz que reinó en la tribuna tras el alejamiento de Roberto Pimpi Camino -asesinado meses atrás de cinco balazos en la puerta de un bar en la zona oeste de la ciudad- el líder de la hinchada durante la presidencia de Eduardo López. Pero nuevamente una feroz interna se desató en el seno de la tribuna.
La barra se fracturó, se dividió en dos y así el clima de tensión volvió a recrudecerse.
La preocupación de que esta noche en el partido entre Newell’s y Estudiantes choquen ambas fracciones es mayúscula. A tal punto que ayer la dirigencia del club rosarino envió a la Justicia una lista con una veintena de socios vinculados a la barra brava para que se les aplique el derecho de admisión.
“Está claro que hay personas que no pueden ingresar a la cancha si queremos evitar hechos de violencia”, declaró Pablo Morosano, secretario del club.
Ayer, a su vez, dos de los integrantes de la nueva fracción que pretende desbancar a Diego “El Panadero” Ochoa, el actual jefe de la barra, quedaron detenidos tras presentarse voluntariamente a declarar, al pesar sobre ellos una denuncia por “golpes y robo” que radicó en la semana el propio Ochoa. Se trata de Maximiliano Rodríguez y Matías Pera, quienes reconocieron haber sacado al Panadero a “trompadas” de la tribuna en el último partido como local, frente a Independiente.
Según averiguó Clarín , en su declaración indagatoria, Rodríguez dijo que Ochoa lo amenazó a punta de pistola en la puerta para que no ingresara a la tribuna. Y que al verlo en la cancha, intentó golpearlo, lo que desató la furia de varios de sus laderos.
“Nadie lo quiere, por eso nadie lo defendió, estamos cansados de sus manejos” , testimonió Pera.
Muchos de quienes hasta hace poco estaban al lado de Ochoa, l o acusan de haber sumado “hinchas de Central a la barra”.
Es más, lo responsabilizan de haber facilitado el robo de varias banderas que fueron robadas de la propia cancha de Newell`s y que hoy están en manos de la propia hinchada de Arroyito.
Ochoa, en tanto, asegura que detrás de este grupo que quiere destronarlo está “la mafia de la droga de Rosario” . “Quieren meter droga en la hinchada y como yo no lo permito, buscan mi cabeza”, dijo. La guerra está desatada. Serán 650 los policías que estarán hoy abocados al operativo para que la jornada termine “en paz” .