Un magistrado de Rosario se animó a dar el paso que nadie dio. Ante la pasividad de la policía y la dirigencia, decidió que el próximo domingo, ante River, no podrá ingresar ningún barrabrava de Newell’s a la cancha para garantizar la seguridad de la multitud que habrá en el Coloso.
Lo sucedido en el Diego Armando Maradona el pasado domingo colmó el vaso. La barra de Newell’s llegó por separado, vivió el partido por separado y se amenazó durante todo el juego que La lepra ganó 2-1.
Ante ese hecho y la proximidad del partido versus River, equipo con el que históricamente hay pica, un juez de Rosario, Juan Carlos Viena, a cargo del juzgado 4, prohibirá a todos los barras de Newell’s, previamente identificados, asistir al Coloso Marcelo Bielsa.
¿El argumento de la medida? Nada más y nada menos que garantizar la seguridad de las 40.000 personas restantes que quieren disfrutar fútbol en paz. Marche un aplauso.
Para asegurarse de no errar los señalados, el magistrado pidió los videos de los últimos incidentes y la Policía le remitió los nombres de quienes estaban identificados. A ellos les sumó a todos los que viajaron hasta La Paternal el domingo pasado. Tanto del grupo ubicado en la platea y del que estaba en la popular.
Ayer declaró uno de los líderes de las facciones enfrentadas, el Panadero Ochoa, quien para zafar entregó los nombres de sus rivales en la interna. Pero no zafó, su grupo y él mismo también cayeron en la volteada.
En la dirigencia de Newell’s agradecieron está mano de la justicia. “La situación era insostenible. No queríamos aplicarle el derecho de admisión sólo a un grupo por lo ocurrido contra Independiente, porque sería legitimar al otro. Por eso, la ayuda de la Justicia es clave”, dijo Pablo Morosano, Secretario del club rosario en declaraciones a Olé. ¿Escarmentarán o seguirán haciendo lío? Y pensar que alguno llegó a pensar que con la muerte del Pimpi Camino la cosa se iba a tranquilizar…
No hay comentarios:
Publicar un comentario